23/2/09

el SUR-sub, XIV (terceras)



el SUR-sub, XIV
(tercera parte)








Ser o no ser


W. S.



Ser y no ser

J.E.C.







Doce metales
Ignoran los rasgos

Que nada revelan
Al Sur y Sub-

¿O es la mar floreciente
Bajo la roca,

Que alimentó a los suyos,
Como una tentación
Eternamente y bajo?

En vaivén
Las olas las
Con los ojos cerrados-
Marcada balanza
A la nada en
Lo que es y no es
Siendo-


Sin exclusión, mi no-

Detienen las estatuas
Su pensamiento,
Última la-
Única constancia
Del incendio,
Suavemente sin-

-Padre, te conozco: Res.

-Hijo, conoces NO.

Nuevamente ladrás,
Perro Mágico,
La escalada escalera,
Lapidada
Bajo el alto e incompleto
Tacón de nadie-

Tumultuoso eclipse
De impreciso origen-
Atado a la ternura,
A lo humánome-

Un nativo más, Medievo-

¿No ves lo no, mi La?

HUMO CREDO-

Los espejos o la hierba-
Todo te turbe-

Vergüenza de la roca:
No hay muerte, mortal-

lament(e), amante.

Sabes que dirá no-
¡No despiertes, Sapo!
No llueve-
No llaman-

Ardid de nieve
Para el talud en llamas-

Compañero ángel,
Frente a tu disolución,
No ha de ser
El último Sello
Quien repita la cuna
Celeste de las fugaces-
Seas un hombre,
Y apenas,
Y además otra sombra-

Cántame mi triste presente sin
Si por vos he perdido lo
Si por vos he
Disuelto los lazos sin-

Saná, zona azul-

El vencejo incesante
Al atarceder
Azotó lo azul la-
Impreso en la memoria,
En el olvido, por tanto,
El rayo que no cesa-

Para tu encuentro
Sólo aguardé
El silencio:
La Cueva-

¡Que nadie escape!
¡Que no me oigas!

Nace
El verso
Como uñas
De mis trozos,
Síes
Destrozados
Más allá ni-

Flores informes
Confortan mi landa-
Alabado seas
SIN
Todo lo personal-
Todo por nada-
Nadie huya-
No te oigan-

Me esfuerzo en
Imaginar las alas
Alzando las palabras
Que se codician
En el origen de
Este infierno-

¡Callá, por sin,
Por mi hambre!


No lo había decidido-
Ahora es irrevocable-

Peón, me enorgullece
Tu muerte entre las flores-

Me acabo de dormir,
Y aún sucede, hermana,
El bosque encantado-

Las aguas nos hablan-

Ahogada,
Te visten las algas-

Por qué. siendo lepra,
Batallábamos desnudos
En la ciega arena-

Quizá no batallamos-
Quizás no recuerdo
Nada del verso-

¿Desde dónde me hablás?

El sótano, largo y amargo-
Entre los dientes,
Si te nombro, huirás-

¿Mi Vida
refleja tu vida, Antonio?

La Otredad
Manifiesta una búsqueda-
Nunca el Encuentro-

Mi Sin-




Antonio López Medinilla





10 comentarios:

Sintagma in Blue dijo...

Sí, sólo es posible la búsqueda.

Ophir Alviárez dijo...

Mi sin...sí...

Abrazo

Madame X dijo...

Escalofríos y nebulosa en la razón. Esas algas que ahogan siempre me impresionan. Nunca sé si es una imagen (imágenes) que surge de los hechos o de la fantasía.

Un beso.

Durandarte dijo...

Lugar donde la voz (tu voz) es fragmento de un diálogo ineludible: el que habremos de mantener con el más íntimo de los pronombres.

Saludos, Antonio.

P.

Gabriela Bruch dijo...

antonio : como siempre , un remolino en mi cabeza y en mi alma , tu poema me centra en el ojo del huracán , bien Venido siempre a MI y amis palabras que son esquivas , cuando el silencio es más poderoso ante TI

antonio medinilla dijo...

Es lo que somos, Pura: el ir, el ir sin.

¿Vienes, estimada?

antonio medinilla dijo...

Ophir, mi no, tu sí, querida amiga.
Arabescos y abrazos.

antonio medinilla dijo...

Querida X, las algas son y no son: no hay diferencia.

Por cierto, existe alguna manera de comunicarme con usted más personalmente (?). La intriga siéndome sí y no, me muerde.

Un abrazo, sea como sea.

antonio medinilla dijo...

Estas voces en diálogo y pronombre roto y esencial, salutan su visita.
Noli me tangere, salvo su honrosa sabiduría, maestro.

Antonio

antonio medinilla dijo...

Bruch, cuánto me alegra su retorno por estos lares. Silencio o no silencio.., al final en mi puerca perspectiva de obrerito poeta, sólo me queda la tristeza de no tener aún su libro entre mis dedos ojos, puñétera.

Su voyeur, Antonio.