Mi tercera mano, sí- Roto el lino protector, sí- Las olas solas de mí Y las rocas otras, sí- Cuarto mundo, sí- Jardines colgantes Abiertos al Agote, Ángel mío, hermano mío- La escritura abierta Al lector, voyeur-
Sí, te conozco-
De la misma sombra De tu misma mano De tu misma hambre De la misma sílaba, Ángel mío, perro dorado, Se crea el silencio Del organismo de mi tristeza, Tu/yo, Existencia-
Algas de nevermore No me respetan al nombrarte En la espuma de las olas-
Salvado al color, No recuerdo La infancia-
No pertenezco-
Venganza cumplida-
El encuentro es improbable Aunque salva el mundo posible-
¿El primer alarido Corresponde a la primera Sílaba?
¿Responde La primera sílaba Al final del mundo silente, SION?
Rocas solas, X-
La DI/solución
Entre las olas-
Callás, danzas
Entre las algas,
Entre Las Me saltas-
Velar
Al dios Inverso,
En su propio núcleo-
ISIS
SEES
NOON
SIIS
INNI
INNO
SION
Indignamente airada, Acosa tu voz, Acusa al adversario/tú, Otro ser retorcido sin La roca roja, Otro dar gris Tu voz otra-
¡Era diferente A ésa!
El obscuro mirador En el temblor Del yuyo inmemorial, Tiempo sólo, Sobras para la sombra,
Me crece en la hierbaSER-
Llamas que
Solapan la Al leer El poema que Nada dijo-
¡Es indiferente!
Cantamos En la sed y el hambre, Que no eres quien Dice la sed y el hambre -si no hay residencia
ni comensal ni comienzo.
Manos de luz
Que a nadie señalan,
Llaman-
Me hambre,
Mi sin,
Ni nombre-
Gris u ocre raigal,
Tacón alto bajo el musgo,
-¿qué es sola la?- Lo semiótico resplandece
En el espléndido sótano,
Aunque
Vague Lo No
Hacia el poema,
En el último sentido,
Desde los rincones de la casa
Donde te exhibes
Como roca desnudez
Como yo como red-
Jamás estallará
En países conocidos-
Es una batalla velada
Entre tú y yo
Cuando el mundo extingue
Su voz
Y vibra el interno- El hombre hojalata Entre el orín y la roña laborable Del escombro de Oz- Pan de hombre, sin más-
Escribiente,
Tu caligrafía aún
Es perfecta-
Aún se conserva
Pulcramente,
En la pizarra,
La Escritura mineral
De rencores y arañas-
La arena, sí,
O el Jardín sin LA,
La canción
Lapidada e insaciable,
Donde el Verbo sin vida
Retorna a la existencia
Del límpido silencio,
Agustín,
El perro ladra
Mi nombre en el tuyo
Bajo aquel amanecer-
Nada le calla-
Fragmentarias,
Circulares,
Sílabas y larvas
En surcos
Me observan y acrecientan
Sin nacer-
Cuando lo nunca agasaje
La noche espiritual,
Y propicie tu reinado,
Al otro lado del verso,
Hallarán cobijo, pordiosera,
Las llamadas moradas
Que las lilas abrigan,
Y encarnan, compañera,
El ramo de disolución
Que coronan tus pies-
Boca rota, sola ropa, Otra roca que habla-
DIANA al cazador-
El cazador
Dispara
La palabra-
Semeja un alarido-
¿A quién corresponde?
¡Mirá! Ha muerto y camina,
Conquistando no, lo sé-
En las cloacas, Mi hija no llora: Escribe tu nombre, Libélula de la Ciénaga-
Adoremuste, Tacones,
Sin nacer-
¿Quién se es ése en el puente, Daena?
Asido de ramas desoladas, Asido de la piedra que ata El milagro de verla En el lugar de nunca, Concurren a la Audiencia Todas las bocas, Padre, Si bien tu Voz Donde queman las palabras Que nadie dice Que cantan nada Donde disparan la Cesa ante el hierro humano De mis manos Al vacío arrojado-
¿No es recurrente el auxilio?
¿Y la flor?
¿La recuerdas, Padre desierto?
Púas y pétalos sin, Éstos en éstas, Otra existencia más Edificada Donde tú y no-
Un penar de aguas blanquecinas-
Mis restos demoran
Su línea discontinua,
Hoscos signos en la arena
Durantes siglos
De inercia desunida-
Apenas fue un aliento-
No lo esperaba así-
La fragmentariedad
En el reino de la memoria
No apartará de mí
Este cáliz-
Anochecerá,
Reposaré
Mis huesos
Entre las finas hierbas
Como un espejo
Antes de la vida,
Ro-to-to-do,
Como un cristal
Ante lo nunca-
Otra gota herida-
Obrero, me enorgullece Tu mortalidad entre las flores-
Siete veces Nunca devoré La estrella alquímica- No hubo mineral, Padre-
Hubo lector-
Hubo, en lo aire, escritura-
Me acabo de dormir,
Y aún sucede, hermana,
El bosque encantado
En las aguas que hablan
De nos sin mí ser-
Intactos sellos En la orina de Estrella-
Lejos y cerca, un ángel Deshabitado se acerca- Insalvable e invisible, Camina a mi lado Como alguien que llora En las miradas Celebrantes de lo nadie-
Todo me sin Y Nada te turbe-
¿Por qué tu dulzura, Nieve o candelabro, No es herencia, Gab?
¡Cuidado, bárbaros!
Arcadia LOS que LAS deambulan,
aunque vas descalza-
Camino y sí- Se abren y cierran Cruces, pétalos- Constancia del mundo, Cristales retorciendo Mis brazos socavados-
Observo su cauce-
Muro a muro, Mudo la piel de No,
Roto en la habitación-
Del sí siendo sin, Pliego AlAs, siembro La grafía arrebatada-
Digo otro mundo-
Sí, Un ruego mágico, Sin,
Res-
Sed De más seré, Miserere/Cantor, y sigue sucediendo quien no eres-
Cánteme un río-
Ora el péndulo sin beneficio, Compañera judía, Sus puntos vocales, Ni una línea más-
Es inútil: no me pertenece La pérdida bajo la almohada del sefardí-
¿Pudo ayudarme Tu sonambulismo, las orillas De tu disparo, Las voces recoletas Arrodilladas en la piedra?
Su puerta amarilla,
Una página en blanco-
Creí en ti
Devorado en el giro-
Del hogar al hogar,
Zanjas y larvas,
Qué perdimos sino
El Recinto: Magna Maga
Donde nadie nunca hubo-
Del marasmo claraboya,
La Bestia ordenó
Silencio a los 5 poderes, Belle -
Silencio de miel cuarteada
En los obscuros rincones
De la voz debida-
Estremece no ser tu/yo Siendo tuyo-
Celebran la gesta De la Estrella errante, Aunque ¡invisibles, venid
al desencuentro!
ERRAMOS- Éramos Que no-
Lepra y fuente oral
En el diario esfuerzo
Al no lugar, Meine Muse,
Hermana hetaira, mi sin-
¿Azotás como debes?
Nada cambia la-
Ningún lugar más allá
Salvo éste: NO-
Su verso,
Más alto que
El monte
Que observa
La Nada,
Ahora es dádiva indigna
De conquitar este mundo-
Nadie querrá mis ojos
Cuando beban de tu mano-
Dormita la vida Que cesas, Sapo-
¿Despierto ahora?
Divida el sur El musgo primordial De éstas mis rocas De la desunión-
Cántala, can-
Sin la realidad
Para lo real la-
Desde la palabra,
Sin la palabra,
Para ella, sin reales-
La hondura, hechicero,
La hondura
Entre las hierbas:
La llamada al sur
Donde el agua respira-
Todos los silentes
Se arrojan al
Puente, desde él
A tu voz fragmentada,
A tu orden
Se aprestan en espirales-
Hemos de llover,
Cerrada la curva
En el último verso,
El sentido es indiferente-
La runa transparente-
Retorno a posar
Bajo la piedra
Lo comunicable-
Despierto a la luz
Y nombro mi sombra-
Ángel a tus pies,
Paso a paso
Comunicado-
Sur, sub la, Y el mar otra vez Si los barcos naufragaran-
Sin nacer, Meine Muse hat Aussatz wie ich, Escritura, He visto te Perfectamente deforme, Formada-
Una palabra tuya Bastará para Deshojar el árbol de La inexistencia: Tu/ya, lo ahora -pero no hay existencia.