(el terror de samsa)
—Como todos, ignorar quién seré al despertar.
*
(el temblor creciente de samsa)
Desconocer, como vosotros, qué dirá el despertar de cada mañana, y que ello aburra, incomode o injurie a la niña pop y a la mujer araña, durante sus desayunos copiosos de cereales y leche espesa con diamantes.
*
(problemas en el alzado)
Samsa lo olvida a veces, pero no hay nada como llegar a casa al atardecer con el río iluminado, con la brisa en las manos, y volar como la luciérnaga destella por el mundo. Una comunidad... invisible bajo el sol.
*
samsa, no debería hablarte
no debería hacer nada
pero tampoco
deberías estar aquí
en el poema
no concibo
cómo logras que suceda
tanto espacio en blanco
para un insecto tan negro
*
No recuerdo las palabras ni su nombre. Pero una voz femenina, atemorizada tras la puerta, preguntaba por él.
—Samsa, por dios, ¿por qué no me abres?
AMEDINILLA
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